
Luego le siguieron la pista aeróbica, la plaza, ahora los baños, la oficina de seguridad, el mantimiento y otras cosas.
Pero hay que decirlo, la lucha de los vecinos logró todo esto con esfuerzo, con la gente juntando firmas, con marchas y reuniones a cualquier hora, siempre con la mirada puesta en la defensa del medio ambiente y el bienestar de la gente, y con esa necesidad lograron lo que hoy es un parque de más de 11 hectáreas para el disfrute de cientos de familias que de manera gratuita llegan todos los días a este espacio público.
Pero uno se pregunta hasta cuando será espacio público? porque bien es sabida la idea del presidente del Club Atlético Temperley de quedarse con parte de las tierras de Finky para seguir haciendo negocios.
Mauro Morrone ganó la última elección del club y aseguró en declaraciones en todos los medios que mientras las tierras de Finky se encuentren en el Onabe, ellos van a pelear para quedárselas. Y así parece que está comenzando ésta toma de terrenos. Hoy por la mañana una cuadrilla de trabajadores estaba colocando postes y alambrando cerca de 3 hectáreas lindantes con el canal y las vías del FFCC Roca.
Asimismo tenían la intención de colocar un portón de acceso al predio que estaban cercando. Hay información que asegura hay gente del Club Temperley detrás de ello.
Lo cierto es que tampoco la municipalidad puede mirar hacia otro lado. Porque uno se pregunta: si los vecinos tomaron tierras como las del Campo Tongui fueron calificados como usurpadores cómo se los debería denominar a los que quieren tomar estas tierras del Estado Nacional, en este caso el Club Atlético Temperley?
Hay que tener en cuenta que ya el Estado les ha cedido de manera provisoria importantes terrenos en los fondos del Club; lo mismo que los talleres cedidos al colegio privado Belgrano, espacio que en un principio iban a ser ofrecidos a extensión Universitaria de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora.
Uno vuelve a preguntarse,

De todas maneras, los integrantes de la Asamblea de Finky Verde siguen apostando al diálogo e intervención de los funcionarios municipales y en especial del intendente Insaurralde para poner las cosas del lado de la Justicia: no se pueden tocar hectáreas de uso público y gratuito para convertirlas en espacios para unos pocos privilegiados.
Todo es confuso por el momento y gracias a la rápida intervención vecinal inspectores municipales se presentaron en el lugar y luego se dirigieron hasta el club. Allí labraron un acta que se adjunta. Suponemos que este acta es un acto de buena voluntad para que el actual presidente del Club Temperley, Mauro Morrone, respete a miles de vecinos que desean un espacio libre, gratuito, popular y que el intendente municipal haga cumplir como debe el mandato popular y la ley.