Represión y control ciudadano pero con más delincuentes en las calles.

Gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal

Como si fuese una contradicción mientras en muchos lugares de nuestro país hay represión, persecución y espionaje, en otra parte de la sociedad casi como rémora se sientan bases para la delincuencia.
En todo el país, el conurbano y Lomas de Zamora en especial diferentes modalidades delictivas se hacen carne en las familias, dolores que no cesan más cuando se llevan vidas. Y sucede a menudo.
La provincia de Buenos Aires, al comando de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal no muestra reacción concreta, sí mucha verborragia ante los delitos. "Voy a convocar a un dialogo social por la inseguridad en el que participen las distintas fuerzas políticas, la justicia, los intendentes y el poder legislativo. Un diálogo en el que podamos fijar acuerdos y sostenerlos en el tiempo" dijo en la apertiura de sesiones legislativas provincial. Sin embargo a los intendentes por éste tema no los recibe.
“La otra pelea es por la seguridad, sé que es el tema que más le preocupa, peleo contra las mafias porque cuando peleo contra ellas, peleo por cada madre y padre preocupado por su hijo, peleo contra las mafias para que así los adolescentes no sean esclavizados por las drogas, por las víctimas de homicidios, sé que peleo por ellos”, reiteró Vidal en su discurso; se nota que no hace demasiado cuando en una comisaría, por dar ejemplo, con 300 manzanas hay 2 patrulleros como la 3era de Temperley lo mismo sucede con la 8ava de Villa Galicia. Y podemos seguir así hasta el último rincón.

No hay política de seguridad pública en la provincia, si muchísimos sueldos, y bastante altos, demasiados cargos y estructuras burocráticas para que no haya soluciones, al contrario, cada vez más delincuencia y policías desatados contra los/as jovenes.

De hecho para dar una señal de ello, en ésta semana de abril -parte de la otra y ésta- se sucedieron una serie interminable de hechos que angustian y que las palabras de la gobernadora no puede curar.
Delitos por secuestro virtual, robos a mano armada, robos de vehículos, robo de llantas, asesinatos, y un daño que se acentúa y nadie para: robo a chicos en las escuelas. 
Hace unas semanas vimos en un colegio de Banfield como dos delincuentes en moto robaban a chicos que salían del colegio.

Ayer al mediodía un chico de 5to año de la escuela secundaria n° 57 -que funciona en el edificio de la EGB N° 69, República de Italia-, mientras esperaba el colectivo en la intersección de Bernado de Yrigoyen y Esmeralda, fue abordado por dos hombres armados, quiénes con intención de robo golpearon en la cabeza a culatazos al joven. También apuntaron con sus armas al pasaje del colectivo de la línea 266. Los delincuentes huyeron según los testigos en un corsa gris sin llevarse nada.
El adolescente golpeado fue llevado al hospital Gandulfo, y luego acompañado por la directora Mariela Magenta, quién en un acto de responsabilidad solidaria y persona de bien llevó al chico a hacer las curaciones y a realizar la denuncia en la comisaría 8ava de Villa Galicia.

Corredores escolares??

Hace unos meses hablamos en éste blog de los corredores escolares. Lamentablemente no funcionan, la policía no está donde debe. Y cuando aparecen en las escuelas la mayoría de las veces lo que los empeña es estacionar en la puerta para que le firmen el cuaderno de control e irse rápidamente. Esa es su tarea, la mayoría de las veces.
En ésta oportunidad a 100 metros de la escuela los estudiantes son atacados con armas con fines de robo sin la presencia policial. 

Y digo que no están donde se los requiere pero si donde no deberían. El sábado último en la plaza de Villa La Perla, nos refieren vecinos del lugar, unos adolescentes que se hallaban reunidos fueron abordados por 4 patrulleros para requisarlos, los pusieron con las manos contra la pared y luego de un largo rato los dejaron ir sin ningún tipo de problemas. Para éso, llegan rápido para el resto de los delitos, jamás llegan.

El vacío de la palabra sin sentido

Entonces caemos en la cuenta que las palabras de la gobernadora Vidal, son sólo éso, para llenar los oídos de los incrédulos y reprimir a los que luchan por sus derechos. La responsabilidad de la policía es de la administración bonaerense, sin ningún tipo de dudas.
No sólo que no actúa a través de su ministro Ritondo, sino que además vacía de acción a las policías locales que también dependen de la bonaerense. 
Varios intendentes del conurbano y el interior de la provincia realizaron un fuerte reclamo a la gobernadora Vidal para que los atienda y pueda dar solución al pedido de destrabar el egreso de muchos policías locales que ya no van a poder hacerlo.
Por un lado, una puja política por el otro denuncias cruzadas por clientelismo y falta de profesionalismo, y finalmente el vacío frente a la sociedad: usaron el caballito de batalla de la lucha contra la inseguridad para que hoy, haya más represión y control ciudadano pero con más delincuentes en las calles.